EL PLACER A TRAVÉS DE LA HISTORIA

EL PLACER A TRAVÉS DE LA HISTORIA

Importancia dada al clímax desde la época de las cavernas hasta la era del viagra

 

Cuando uno hace un recorrido histórico, va a ver que el significado que se le otorga a la sexualidad y al placer varía según el momento histórico que se estudia. La desigualdad entre los sexos genera más brecha en las posibilidades de goce. Por el contrario,  a  mayor igualdad, se abre paso al derecho de una sexualidad más libre de tabúes.

Hay 3 indicadores para evaluar si en una  sociedad el sexo está más ligado al placer que a la reproducción:

LA TOLERANCIA A LA MASTURBACION
LA ACEPTACION DE LA HOMOSEXUALIDAD
EXISTENCIA DE METODOS ANTICONCEPTIVOS

El hombre prehistórico no establecía relación alguna entre el intercambio sexual y la EYACULACIÓN como causante del embarazo.  Luego comienzan a darse cuenta del papel masculino... “¡Sorprendente poder tenían las criaturas con penes!”.  

Las sociedades que conocen el papel masculino de la FERTILIZACIÓN, comienzan a interesarse por los hijos. Este concepto de PATERNIDAD encajó a la perfección con la idea de PROPIEDAD. Desde ahí, han empezado a  reclamar poder para llegar a convertirse en el sexo dominante. Y la virginidad requerida a la mujer permitía tener la seguridad de que los hijos eran del marido y  los indicados para heredar las tierras y los animales del padre.

En la cultura egipcia se creía que los actos sexuales habían originado todo, hasta el Universo. Una vez por año, el faraón se masturbaba a orillas del Nilo para mejorar la fertilización de las tierras. Esta ceremonia no tenía connotación sexual,  en la historia egipcia el hilo principal era el onanismo, desde el mito de la creación donde el Dios Atum origina todo mediante su masturbación. Y desde este lugar, por la convicción de que el sexo formaba parte de la condición humana, no debía generar culpa. (Aún cuando las jóvenes eran desvirgadas mediante matrimonios arreglados)

 Centrémonos en La primera cultura en aplicar métodos para la búsqueda del placer… GRECIA. Del griego deriva la palabra ORGASMO  (hincharse por la humedad). Cultura que promueve el  goce sin culpa del cuerpo y de la mente. Cultura hedonista, que busca el placer como el fin de la vida; la idea cristiana de pecado era todavía un concepto inexistente.

Para los griegos, la homosexualidad era la forma apropiada de transformar a un joven en un ciudadano honrado. Pero la homosexualidad femenina no estaba tan bien vista.  

Tanto el Antiguo EGIPTO como la medicina hipocrática consideraban el activo deseo sexual femenino como una enfermedad llamada HISTERIA: enfermedad causada por el movimiento del útero. Las mujeres “necesitaban”  tener relaciones sexuales periódicas para no enfermarse.

Creían en la insaciabilidad de la energía sexual femenina.  De esta forma, la satisfacción del apetito sexual poco tenía que ver con el placer. Los hombres les hacían un favor médico teniendo sexo con ellas.

GALENO fue uno de los primeros médicos en recomendar la masturbación terapéutica en mujeres.  OLISBOS (primeros consoladores hechos de madera, y usaban como lubricante aceite de oliva). Pero también Galeno es el que describió los genitales femeninos como una versión mutilada de los masculinos, reflejando el pensamiento general de su tiempo: que el hombre era superior a la mujer.

Aún cuando para los griegos, el matrimonio, el amor y el sexo no estaban relacionados (el objetivo del casamiento era tener un hijo y heredero, y las prostitutas eran mujeres libres que daban rienda suelta a las fantasías sexuales), las mujeres una vez por año conmemoraban las festividades de la fertilidad, donde podían salir de su encierro y concurrían a santuarios destinados a disfrutar de sus propios ritos eróticos.

La cultura romana avanzó más que la griega en la igualdad de los miembros del  matrimonio en cuestiones del placer.  RUFUS: creó el ideal del matrimonio moderno. EQUIDAD SEXUAL: ninguno de los dos miembros del matrimonio tenía derecho a tener sexo fuera de la pareja o antes de casarse. Las reglas eran las mismas para ricos y para pobres.

A pesar de esto, Roma es la ciudad donde floreció la prostitución, a través de los bacanales romanos. Tanto los griegos como los romanos, hablaban de la importancia de perseguir el logro del orgasmo en las mujeres.

Cuando se buscan estrategias para mejorar nuestro “arte amatorio”, en general solemos posar nuestra mirada en la cultura oriental y empezamos a recorrer las páginas del Kamasutra  con sus 529 posiciones sexuales y “El jardín perfumado”, libro creado en Arabia, donde se relatan técnicas de estimulación del clítoris y las zonas erógenas femeninas.

Empecemos  por la cultura China, que tiene la autoría de los primeros manuales sexuales de la historia. La característica más definida del sexo para los chinos era el placer por sí mismo, sin relación con la reproducción.

 El I Ching hace una  descripción con referencia al fuego y al agua para marcar la diferencia entre el orgasmo masculino y el femenino.  Devotos del TAO, mencionan al Yang: energía masculina, radicaba en el semen como un elemento limitado; y al Ying: energía que la mujer produce durante el acto sexual, que es ilimitada y puede alimentar el Yang masculina. Se suponía que si el hombre podía mantenerse dentro de la mujer por un tiempo prolongado tenía más posibilidades de absorber el YIN. Se esmeraban por brindar a la mujer la mayor cantidad de orgasmos posibles.

El cunnilingus era ampliamente aceptado tanto por el placer que originaba como por los beneficios de otorgarle al hombre la esencia del YIN.

En la INDIA: Kamasutra: Tratado del placer sexual.  Sexo tántrico; creencia que el hombre y la mujer son como el polo positivo y negativo de la energía que fluye  a través del acto sexual.

Se adoraba a la mujer , los hombres debían utilizar todos los medios disponibles para adorar y satisfacer a sus esposas. “Los seguidores del Tantra no le hacen el amor a la vagina, sino al ser humano como un todo”.

Hablemos de los japoneses: la contribución más famosa que realizaron a la historia del orgasmo fueron las bolillas BEN WA (alegría). Una cortesana japonesa, descubrió que colocando dos bolillas dentro de la vagina durante horas, una mujer podía alcanzar una especie de orgasmo permanente y sutil.

Lo más característicos en Oriente  es el placer orgásmico en sí mismo, sin ninguna relación con la reproducción. En estas culturas se remarca que las mujeres son mucho más carnales que los hombres, considerando el tiempo que las lleva a alcanzar el orgasmo y su infinita posibilidad de repetición. l

Con el CRISTIANISMO, aparece la idea de que el único propósito del sexo debía ser la concepción. El sexo era sinónimo de lujuria a menos que tuviera un objetivo de procreación.  No olvidemos que para los hebreos era importante la procreación para la perduración de su pueblo, por eso la masturbación era castigada con la muerte. Onán , después de que su hermano mayor fallecería, debía casarse con su viuda, tal como lo dictaba la ley judía. Cada vez que tenía una relación con su cuñada, eyaculaba sobre la tierra. Como respuesta a esto, Dios mató a Onán, porque el principal pecado era el desperdicio o derramamiento de semen. De ahí viene el término onanismo, aunque en realidad, según la descripción bíblica, se trataba de un coito interruptus.

En 1563 se celebra el Concilio de Trento: “constituye una mayor bendición mantenerse virgen o dentro del celibato que formar matrimonio”. Pero incluso en el mundo católico se obviaban las severas normas oficiales contra el sexo: se permitían matrimonios en el clero, siempre y cuando no mantuvieran relaciones sexuales. Una mera formalidad, ya que en general los papas tenían hijos.

La idealización del celibato proviene de la supuesta virginidad de Jesús y de su madre pero fue el Papa Inocencio II el que lo instauró para evitar que el matrimonio de los curas siguiera diseminando la propiedad eclesiástica. Detrás de la instauración del celibato, se esconden razones económicas.

Para Santo Tomás de Aquino, el sexo era equivalente a la lujuria. Las cuatro perversiones eran la zoofilia, la homosexualidad, las posiciones sexuales que no fueran la del misionero y la masturbación.

Incluso la “chemise caguole”, especie de pijama con un orificio central para permitir la penetración, propia de los judíos ortodoxos, asegura que no haya un contacto de piel innecesario durante la procreación.

La EDAD MEDIA Y EL RENACIMIENTO fueron el apogeo del goce orgásmico libre, sin culpa y sin complicaciones. Principalmente en  China, India, Japón, Oriente Medio y América Central, (antes de que los colonizadores lograran imponer con fuerza los nuevos valores cristianos)

CHINA MEDIEVAL: Pie de Loto (pies vendados) envueltos en un pequeño trozo de seda, se lo consideraba el área más privada del cuerpo femenino. Acariciarlo constituía el acto más íntimo entre la mujer y su marido o amante. Algunas mujeres desarrollaban su arte erótico al punto de poder sujetar el pene de su amante con los pies y llevarlo hasta la vagina. El vendaje de pies fue prohibido en 1902.

INDIA: aparece el ANANGA RANGA, un libro de autoayuda que incluía fragmentos del kamasutra e impedía evitar los problemas maritales producto del aburrimiento sexual. “La razón principal de la separación del matrimonio, es la monotonía que produce la posesión”.

En América se podía encontrar toda una cultura a favor del placer sexual. Por ejemplo, algunos vasos peruanos tenían forma de vulva para que mientras los hombres bebían, simularan un cunnilingus.

AMOR CORTESANO: tenía lugar entre solteros que no mantenían relaciones sexuales. El verdadero amor implicaba besarse, tocarse y adorarse, con el mínimo contacto de los cuerpos desnudos y nada de sexo. También para Santo Tomás, besarse y tocarse constituía un pecado mortal.

1559: científico de Venecia Reinaldo Colombo: descubre el CLITORIS, al que lo llama “amor o dulzura de Venus”. Después otros médicos como Bartholim, Vesalius y De Graaf, lo corroboraron

En la tradición cristiana los placeres de la carne son un padecimiento, en la época de la caza de brujas un gran clítoris era considerado como la marca del diablo. Para la iglesia, solo se aceptaba el coito para procrear, por eso se tendía a pasar por alto las partes del cuerpo femenino que se consideraban irrelevantes para la reproducción. Por eso, durante casi 200 años, el clítoris vuelve a caer en el olvido. Recién reaparece en escena en 1844, con unos dibujos del alemán Kobelt. La ciencia no se siente cómoda con el clítoris, no encajaba como único lugar del cuerpo que tiene como único fin el placer. En la última etapa del siglo XX hay una reconsideración del clítoris como centro real del placer femenino.

Incluso antes de que tuviera nombre, el orgasmo se consideraba un problema para las mujeres. Para una afección llamada Histeria, se sugería que una partera masajeara los genitales femeninos con un dedo dentro de la vagina, utilizando aceites como lubricantes. De esta forma, la mujer podía ser conducida a un arrebato.

Luego de unos cuantos años, surge el orgasmo terapéutico, aunque se los aconsejaba a las mujeres más como un método calmante que como un tratamiento médico.

Con el nuevo siglo XIX nació un pronunciado movimiento anti sexual. Se reverenciaba el superior ser espiritual femenino. Idea que la sexualidad femenina era de naturaleza más apacible que la masculina. Silenciamiento del deseo sexual femenino.

Era victoriana: las mujeres debían ser dulces y humildes y exteriorizar sus sentimientos sólo a través de un tímido sonrojamiento o una leve sonrisa. Incluso dentro del matrimonio, las mujeres no podían liberar su impulso sexual. En esta era es cuando la pornografía se transformó en un éxito de ventas (alimentó las fantasías sexuales).

Silenciamiento del deseo sexual femenino. Se consideraba que la excitación y la vida libertina de las mujeres podían dañar los órganos reproductivos y urinarios. Una mujer decente no debía sentir placer.  Por eso se impusieron las Cirugías curativas para la sexualidad femenina: histerectomía, clitoridectomia para doblegarla. El primer vibrador aparece en el 1880 y se lo usaba como cura para la histeria. No se lo consideraba como un elemento sexual, solo para mejorar la salud.

En el siglo XIX el lesbianismo y la ninfomanía eran considerados como enfermedades y la masturbación provocaba ictericia, ceguera y muerte prematura. La excitación sexual para los médicos de la época desequilibraba mentalmente a las mujeres y se culpaba al clítoris.

Tissot, un médico suizo, llego a afirmar que la masturbación era la más mortífera y siniestra de las prácticas sexuales. Después aparece el  concepto de “locura masturbatoria” de Kraft Ebbing  (1886). En la base de ciertos cuadros psicóticos estaba la masturbación.

Cómo se llegó a esta relación entre locura y masturbación? Una serie de estallidos de sífilis empezaron a extenderse en la población europea. No existía ninguna teoría sobre cómo se contagiaban las enfermedades venéreas, solo se observaba que la contraían los que eran más activos sexualmente. A esto se sumaba que los internados en los manicomios jugaban con los genitales más de lo normal, de ahí sale la conclusión errónea que la masturbación era la causa de debilidad física y mental.

Porque desaparece la masturbación como causa de enfermedades serias? En 1861 Luis Pasteur desarrolla la teoría microbiana que planteaba que las enfermedades no se contraían por exceso de enfermedad sexual sino por la transmisión de microbios. Así, por ejemplo, la tuberculosis era causada por una bacteria, no por la masturbación. Luego se identificaron los microbios que transmitían la gonorrea, la sífilis, y con el descubrimiento de la penicilina como 50 años más tarde, pudieron curarse. Asi se disolvieron las causas sociales y culturales de la enfermedad.

Después de que Goodyear inventó la goma elástica en 1843, algunas compañías adaptaron esta materia prima para la fabricación de gruesos condones reutilizables. Se luchó vigorosamente contra los condones, por considerarlos inmorales y anticristianos.

La historia del preservativo se remonta a la época de Falopio, que lo crea  durante la primera epidemia de sífilis. Funda de lino diseñada para la protección y no para la concepción. Los antiguos egipcios ya habían utilizado formas rudimentarias. Luego un médico inglés, Condón, preocupado porque Londres se llenaba de “bastardos” reales. Lo más cercano al preservativo moderno, con fines anticonceptivos, antes del invento de Goodyear,  y  tenía como intención evitar los embarazos, no sólo impedir la propagación de enfermedades.

 En palabras de Thomás Laqueur, con la entrada del siglo XX se observa como la masturbación pasa de ser un oscuro vicio para transformarse en una superestrella sexual. Aparecen voces de cordura dentro del ámbito científico.

Hay una reconsideración del clítoris como el centro real del placer femenino. La ciencia no se hallaba cómoda con el clítoris, sobre todo cuando se pensaba que la finalidad biológica del sexo era sólo la reproducción. Entonces? Donde encajaba el clítoris que es la única parte del cuerpo que como única función tiene la de proporcionar placer?

 Sigmund FREUD, establece la polaridad ORGASMO CLITORIDEO VS. ORGASMO VAGINAL. Hablando de éste último como el ORGASMO DE LA MUJER MADURA. Si no lograba el orgasmo a través de la penetración, la mujer era considerada infantil desde el punto de vista sexual. Establece una jerarquía entre ambos orgasmos. Hay una insistencia en el pasaje de la sexualidad clitorídea a la vaginal en las mujeres, como forma de llegar a una maduración sexual adecuada.

Freud comienza a hablar del retorno terapéutico del onanismo. Subrayó el carácter sexual de todos los aspectos de la experiencia humana. Y la masturbación era una etapa del desarrollo normal.

Aparece William Reich (en la misma época) que habla de la masturbación como un indicio de mejoría en la terapia. Y empezó a allanar el camino para las terapias sexuales.

INFORME  KINSEY: (1948) Sus estadísticas alentaron a ambos sexos a creer que prácticamente todo lo que les daba placer era valedero. Confirmaron la normalidad de la masturbación desde un punto de vista estadístico.

1960: INVENCION DE LA PILDORA ANTICONCEPTIVA:  Permitió a las mujeres explorar su sexualidad  liberadas de la carga que representaba el embarazo.. CON LA APARICIÓN POSTERIOR DEL DIAFRAGMA Y EL DIU, PERMITIERON SEPARAR CLARAMENTE LA SEXUALIDAD PLACER DE LA SEXUALIDAD REPRODUCTIVA.   APARECEN LOS MOVIMIENTOS FEMINISTAS Y EL “AMOR LIBRE.

FEDERACION DE LAS MUJERES FEMINISTAS DE BOSTON: lograron una versión anatómicamente correcta del clítoris.  Identificaron 18 estructuras del clítoris. Los materiales escritos por ellas animan a las mujeres a sentirse libres de masturbarse como medio de explorar y de gozar de sus cuerpos.

1966: MASTER Y JOHNSON: defensa al rol del clítoris, como una pieza clave del orgasmo femenino. Un órgano tan complejo como el pene. También mencionan 4 fases en la respuesta sexual: excitación, meseta, orgasmo y resolución.

INFORME SHERE HITE 1976 (al igual que Kinsey, demostraron que la estimulación manual del clítoris era la mejor forma de alcanzar el orgasmo) Las mujeres son multiorgásmicas por naturaleza.

Desde 1973 la Comunidad Científica Mundial deja de considerar  LA HOMOSEXUALIDAD COMO ENFERMEDAD. En 1974 la Asociación de Psiquiatras la retiró como enfermedad de DSM

1974: PUBLICACIÓN DE “LA NUEVA TERAPIA SEXUAL” DE HELEN KAPLAN,  hito en las llamadas terapias sexuales, después del trabajo de Master y Johnson…. Presenta un modelo trifásico de respuesta sexual: DESEO, excitación y orgasmo.

Con la APARICION DEL HIV, hubo que “erotizar” el uso del preservativo. Cuando gracias a los antibióticos y a los anticonceptivos el profiláctico había caído en desuso, hubo que estimular su uso nuevamente, para favorecer el cuidado.

SILDENAFIL: (1998) descubierto por los laboratorios Pfizer, revolucionó el tratamiento de la disfunción eréctil. Un hito en el desarrollo farmacológico. Después de la píldora, la segunda revolución sexual del siglo XX. Se hicieron intentos para el de mujeres, pero la sexualidad femenina es mucho más compleja. Solo se beneficiaría el flujo sanguíneo y la vasodilatación. Pero no incentiva el deseo, no actúa sobre los factores emocionales y culturales.

1998: La APA (Asociación psiquiátrica americana) se opone a cualquier tratamiento psiquiátrico (Terapia Reparadora o de conversión) que se basa en asumir la homosexualidad como un desorden mental, partiendo del supuesto que el paciente debía cambiar su orientación sexual.

LA SOCIEDAD VA TOMANDO EN CUENTA QUE DEBE ABANDONAR POSICIONES DISCRIMINATORIAS HACIA LAS MINORIAS SEXUALES, AUNQUE MUCHO POR HACER TODAVIA

INTERNET: viene acompañada de una amplia oferta de sexo, pornografía, encuentros afectos y sexuales a través del chateo, como una nueva manera de relacionarse.

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Pudimos ver en este extenso recorrido como el significado que se le otorga a la sexualidad y al placer varía según el momento histórico que estudiemos.

Por ejemplo, la Masturbación pasó por distintas etapas: de ser un tema médico y moral importante, a ser considerada una etapa normal del desarrollo humano, hasta llegar a ser un elemento clave para la liberación sexual y personal. Y en estos últimos años, la práctica sexual más beneficiada fue la masturbación femenina, luego de la explosión de los años 60, con la invención de la píldora anticonceptiva, que permitió a las mujeres pensar el sexo como búsqueda de placer y no necesariamente ligado a la posibilidad de embarazo.

El segundo hito en la industria farmacéutica, la aparición del viagra, hizo que  se intentase una versión para mujeres, que no tiene éxito por la complejidad de la sexualidad femenina. Ningún conjunto de pastillas actúa el deseo.

El stress causado por el ritmo actual de vida, puede llevarnos a disfunciones sexuales, está comprobado que puede bajar los niveles de testosterona.

 La tendencia de la sociedad nos lleva a querer vivir el sexo a pleno. Y que ambos sexos puedan disfrutarlo por igual. Quedan algunas batallas por librar; no tomar el sexo como un examen que nos llena de ansiedad por el desempeño, y  pensarlo como un encuentro, donde lo más importante sea la calidad del contacto.

Se trata de pensar el goce sexual como “un valioso milagro para vivir mejor”.

LIC. MARIA ESTER ANTELO

Lectura recomendada: "Historia íntima del orgasmo" Jonathan Margolis

 

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